Personajes secundarios: Anatomia, expresiones, vestimenta, exploracion de colores y colores oficiales.
Personaje principal: Anatomia, vestimenta y colores




Escenarios del storytelling








Storytelling visual para el evento de MASIVO del 2024
Concepto: Los hilos invisibles que nos unen.
Previsualizacion y analisis a grises


Stroytelling visual a color y completo








Creacion y caracterizacion de personajes bocetos, lineas finales, exploraciones de colores
MAPACHE
El mapache un guerrero de arena indómito, yacía ahora sumido en un mar de barro. Su pelaje, otrora brillante y lleno de vida, se había oscurecido y apelmazado, convirtiéndolo en un fantasma de su antigua gloria. Sus ojos, antes ágiles y penetrantes, reflejaban ahora la melancolía de un alma perdida.
Atrapado en esta ciénaga, se sentía pequeño y vulnerable como un cachorro, expuesto a las burlas de la kin'lesai, una generación maldita que se alimentaba de la desesperación ajena. Había sido un guerrero, un líder, pero ahora era solo un cascarón vacío, arrastrado por la corriente de un destino cruel.



Pento, un fantasma mas en la maquinaria industrial, su vida un engranaje oxidado en la rueda del progreso. Sus días, una danza macabra entre el sudor y la desesperanza, eran la moneda de cambio por unos cuantos monedas. Un día, sin previo aviso, su cuerpo se convirtió en un pozo negro de crudo, un manantial de oro líquido brotando de sus poros. La fábrica, antes un infierno de ruido y humo, se transformó en un escenario de asombro y codicia. Los engranajes de la avaricia se pusieron en marcha, y los ojos de los jefes brillaron con la intensidad de mil soles. Veían en Pento no a un hombre, sino a una mina ambulante, una fuente inagotable de riqueza.
Pero Pento, atrapado en esta pesadilla, solo ansiaba escapar. Su cuerpo, ahora una bomba de tiempo, era un arma de doble filo. El petróleo, antes un tormento, se convirtió en su escudo. Con cada gota que expulsaba, sembraba el caos y la confusión entre sus captores. Con un rugido sordo, como un volcán en erupción, Pento se liberó de sus cadenas, dejando tras de sí un rastro de oscuridad y asombro.
Ahora, errante y solitario, vagaba por un mundo que ya no reconocía. ¿Quién era él? ¿Un monstruo? ¿Un héroe? El petróleo, que antes lo había esclavizado, ahora lo había liberado. Pero la libertad tenía un precio, y Pento se preguntaba si estaría condenado a vagar por la eternidad, un ser marcado por la tragedia y la paradoja.



PENTO
Tinkle
Un aluvión de sonido se abatió sobre Tinkle. Los tambores retumbaban con furia, los timbales resonaban con una fuerza ensordecedora, los bongós golpeaban un ritmo frenético. Tinkle se mantuvo firme, su triángulo vibrando en sincronía con el torbellino de sonido.
"¡No me doblegaré!" gritó Tinkle, su voz apenas audible por encima del fragor de la batalla. "¡Mi triángulo es mi voz, y mi voz será escuchada!"
Con un movimiento ágil, Tinkle hizo girar su triángulo, creando un remolino de sonido que se extendía por el campo de batalla. Un sonido agudo, penetrante, que resonaba en los oídos de los membranófonos, desgarrando su música con una melodía de resistencia.
Los tambores se tambaleaban, los timbales perdían su ritmo, los bongós se silenciaban. La música del ejército de membranófonos se desmoronaba, desgarrada por la melodía de Tinkle, el niño del triángulo.
"¡No se puede silenciar la voz de la esperanza!" resonó Tinkle, su triángulo brillando con una luz dorada. "¡No se puede aplastar la melodía de la libertad!"


El viento silbaba una melodía fúnebre a través de las llanuras, mientras Tinkle se alzaba, una figura diminuta pero llena de determinación. Su triángulo, antes un símbolo de burla, ahora brillaba con la luz de su coraje. A su alrededor, un mar de tambores, timbales y bongós, resonaba con la amenaza de un ejército formidable.
"¡Tinkle, el del triángulo! ¡Un insecto que pretende desafiar a los titanes del sonido!" rugió el general de los membranófonos, su voz resonando como el golpe de un trueno. "¡Ríndete, o serás aplastado bajo el peso de nuestra música!"
Tinkle, con la mirada fija en el horizonte, no respondió. En su mente, resonaba una melodía diferente, una melodía de esperanza, de rebeldía, de un futuro que él mismo estaba esculpiendo.
"¡Ataquen!" bramó el general.




Acercamiento al concepto
Primero bosquejos


Organizando idea base
Finalizando idea y pequeños detalles

Diseño final


Publicacion para instagram

Correo para invitar a ser parte de el proyecto
